El Comité de la Internacional Socialista para América Latina y el Caribe, reunido en Montevideo los días 17 y 18 de mayo, expresa que:
La Internacional Socialista ha estado estrechamente implicada durante largos años en la situación de Venezuela y ha venido constatando con preocupación el deterioro de su democracia y el creciente autoritarismo en el ejercicio de las distintas funciones públicas en el país. La Internacional ha expresado de modo constante y sistemático a través de sus diversas instancias, y muy particularmente de su Comité para América Latina y el Caribe, su compromiso con la democracia en Venezuela y su preocupación ante su debilitamiento. De la mano con lo anterior, ha denunciado reiteradamente violaciones a los derechos humanos de los venezolanos, restricciones de sus libertades y derechos políticos, la degradación de las condiciones de vida de los venezolanos y la polarización de su sociedad.
La IS siempre ha creído que los desafíos a la democracia deben responderse con más democracia. Por lo mismo, saludamos el resultado de las elecciones de 2015. Sin embargo, desde la instalación de la Asamblea Nacional en enero de 2016, el gobierno del presidente Maduro se empeñó en desconocer la voluntad soberana, acusando desacato, bloqueando iniciativas y finalmente convocando la elección de una Asamblea Constituyente que vino a conculcar las legítimas potestades de la Asamblea Nacional.
En la víspera de las elecciones presidenciales convocadas para el domingo 20 de mayo, el Comité expresa que no existe hoy en Venezuela una autoridad independiente a cargo del proceso electoral. La fecha de realización de los comicios fue fijada y luego cambiada de modo unilateral y arbitrario, estableciendo plazos en los que resulta imposible levantar candidaturas competitivas. Hay líderes políticos impedidos de presentar sus candidaturas por encontrarse encarcelados, inhabilitados o en el exilio. No hay libre acceso a los medios de comunicación para llevar adelante actividades de campaña, mientras es visible que cotidianamente el gobierno abusa de recursos públicos para asegurar su reelección. No hay observación internacional con credibilidad y el sistema de voto automatizado se encuentra cuestionado desde las elecciones de la Asamblea Constituyente en agosto de 2017 por la propia empresa proveedora de la tecnología que lo soporta. En consecuencia, el Comité desconoce toda legitimidad a los próximos comicios por carecer de las garantías mínimas para ser considerados libres y justos.
Una vez más el Comité expresa su confianza en que los esfuerzos y anhelos del pueblo venezolano abrirán camino a una recuperación de la democracia en ese país que permita asegurar un futuro de libertad y de dignidad al hermano pueblo de Venezuela.
El Comité reitera su llamamiento por la liberación de todos los presos políticos; por el respeto a la Asamblea Nacional y todas sus prerrogativas y por el reconocimiento de las potestades e inmunidades de los parlamentarios en el ejercicio de sus cargos; por la nominación de autoridades electorales independientes y por el establecimiento de un cronograma electoral que asegure elecciones libres, justas y competitivas en los más breves plazos, con una verdadera y amplia participación de partidos y candidatos.
El Comité teniendo en cuenta la grave crisis económica que enfrenta el país y la escasez de alimentos, medicamentos y artículos de primera necesidad, hace un llamamiento al gobierno, a la sociedad civil, los organismos internacionales y a la comunidad internacional a movilizar de modo inmediato toda la ayuda humanitaria posible para Venezuela.
Nuestra Internacional no descansará en apoyar la lucha por la libertad y la democracia del pueblo de Venezuela, al que hoy desde Montevideo le enviamos nuestra plena solidaridad.
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