Roma fue la sede de una reunión del Comité de la IS para Europa Central y Oriental, SICEE, los días 27 y 28 de junio de 1997. Presidida por Piero Fassino (Italia, PDS) y Lászlo Kovács (Hungría, MSzP), Co-Presidentes del Comité, la reunión se centró en las perspectivas del proceso de integración de los países de la región en instituciones multilaterales. Los delegados presentaron también informes sobre sus situaciones nacionales y el Comité discutió su labor y actividades futuras. Los participantes representaron a cerca de 40 partidos y organizaciones. Luego de extensas discusiones, el Comité de la IS adoptó una Declaración que aplaudía la grande y positiva transformación que en la mayoría de los casos han experimentado los países de la región, pero poniendo énfasis al mismo tiempo en las graves desigualdades sociales que existen en algunos países, y la consiguiente necesidad de políticas que equilibren la modernidad con la solidaridad - los reglamentos y el mercado y la redistribución de la riqueza. Los partidos socialdemócratas -la mayoría de los cuales se encuentran en gobierno actualmente- tienen por lo tanto un papel crucial que cumplir, recalcó el Comité. La Declaración subrayó además la importancia de continuar con la integración europea con seguridad y estabilidad, lo que se podrá lograr más facilmente a través de medidas económicas, sociales, medioambientales y políticas, como también a través de una ampliación escalonada de la OTAN y del Partenariado por la Paz, de la OSCE y de otras organizaciones de cooperación regionales. Los derechos sociales y democráticos fundamentales no deben colocarse en un lugar secundario después de la modernización económica, manifestó. Aplaudió los recientes desarrollos políticos en Rumania y en Bulgaria, y manifestó su esperanza para una evolución positiva en Serbia y Montenegro y en Turquía. Se dio gran importancia a la protección y consolidación de los Acuerdos de Dayton sobre paz en Bosnia, y el Comité subrayó el decisivo papel que ha cumplido la comunidad internacional en Albania y enfatizó que Rusia y su situación futura son fundamentales para las perspectivas en toda Europa.
